martes, 23 de agosto de 2022

El kirchnerismo no es peronismo sino comunismo cubano. (Artículo escrito en el 2017, la política circular argentina hace que vuelva a tener vigencia, ahora que CFK quiere refugiarse en el peronismo para que la defienda).

 

¿Notaron que Cristina nunca nombra a Perón?

Esto es así porque el General echó a los Montoneros de la Plaza de Mayo acusándolos de imberbes e idiotas durante el acto del primero de mayo de 1974.

Los dirigentes del partido comunista de la URSS y de su satélite cubano, durante la década del 70 comprendieron que nunca llegarían a las masas obreras en Argentina mientras existiera el peronismo, por lo tanto cambiaron de estrategia, en lugar de competir con él decidieron infiltrarlo.

Esa acción la hicieron antes de la vuelta de Juan Domingo Perón, cuando éste se encontraba exiliado en España y uno de los emisarios fue Hector J. Campora.

El general en su maquiavélica estrategia política consideró útil usar a los “jóvenes de izquierda” que Cámpora le proponía, para facilitar su vuelta y sobre todo mediante ellos captar el apoyo de las juventudes universitarias que en su mayoría eran de izquierda (en todas sus versiones, socialistas, comunistas, trotskistas, etc.).

Los que asistimos a las diferentes facultades a principios de los 70 hemos podido ver filmes clandestinos (no existían aun los videos) donde Perón daba clases de “insurrección armada” explicando la organización en células, tácticas guerrilleras y otras menudencias.

Cuando finalmente regresó a la Argentina asistimos a la “masacre de Ezeiza” porque en ese momento la derecha peronista (Osinde, Norma Kenedy y otros) ya le habían advertido a Perón del alto nivel de penetración comunista que tenía el movimiento justicialista, de la mano del hasta ese momento su hombre de confianza (Hector J; Campora).

Allí el general indignado “dejo hacer” y los muchachos de la derecha decidieron dar un escarmiento a los “zurdos” y tuvimos a los muertos de Ezeiza.

La cosa no quedó ahí y los muchachos de izquierda decidieron iniciar la lucha armada y aparecieron los distintos grupos guerrilleros de signo “peronista”, las FAP (Fuerzas Armadas Peronistas) y sobre todo los Montoneros. Las consignas eran por un “socialismo nacional”. Se enfrentaron a la derecha peronista antes mencionada y sobre todo a la “burocracia sindical” a la que acusaban de ser los responsables de la pérdida del apoyo del general hacia su visión de izquierda.

Como eran jóvenes y leían poca historia no cayeron en la cuenta que Perón siempre fue de derecha con una gran admiración por el fascismo y el nazismo. No olvidemos que al final de sus días y cuando necesitaba tener siempre cerca de sí a un equipo de médicos, dio órdenes estrictas de “no tener a ningún judío” entre ellos.

Finalmente los grupos armados de la izquierda peronista se unieron bajo el nombre de Montoneros y entre otros cometieron el asesinato de Rucci, esto último al poco tiempo del regreso de Perón.

Este acto de desafío al general hizo que éste definitivamente les declarara la guerra, echándolos de la plaza y organizando la represión mediante la triple A y las fuerzas armadas que todavía estaban subordinadas al orden democrático. Los Montoneros le respondieron pasando a la clandestinidad y alejándose definitivamente de Perón, reivindicando la figura de Evita en su posición de izquierda que como estaba muerta no podía negarla, con el slogan “si Evita viviera seria Montonera” pintado en las paredes de todas las facultades.

Esto es histórico ahora si nos acercamos más a nuestros días vemos que todos estos guerrilleros sobrevivientes (Abal Medina, Firmenich, Vaca Narvaja y otros) anduvieron de capa caída hasta la llegada de Néstor Kirchner al poder. Antes habían pasado por diferentes situaciones de riesgo, primero tuvieron que huir cobardemente durante la dictadura militar dejando a sus idiotas útiles como “carne de picana” mientras ellos se refugiaban en el exterior (principalmente en Cuba donde incluso depositaron millones de dólares producto del secuestro de los Born). Luego con la vuelta de la democracia tuvieron que enfrentar juicios por sus crímenes (doctrina de los dos demonios) cuando durante el gobierno de Alfonsín que juzgó a los militares también los juzgó a ellos por los crímenes cometidos (asesinatos de empresarios, intelectuales, sindicalistas, militares, policias y políticos).

Finalmente hubo el indulto de Menem a ambos sectores y se mantuvieron con un perfil bajo y vergonzante hasta la llegada de Néstor.

El tuerto vio la oportunidad que tenia para aumentar su escaso poder inicial en el hecho de volver a captar a la izquierda y así lo hizo, volviendo a infiltrar el movimiento justicialista con zurdos, mas comunistas que nunca. Nótese que precisamente la organización que les servía de interlocutora fue denominada “La Campora” comandada por su hijo Máximo (cuando no estaba con la play station).

Durante su gobierno primero y con el de CFK luego asistimos al apoyo incondicional que las organizaciones de izquierda patrocinadas por Cuba (CELS, Madres, Perez Esquivel, APDH, etc) le dieron para así conseguir lo que no habían logrado antes, es decir transformar al peronismo en comunismo.

Lo lograron, al día de hoy basta ver cuál es su posición en la política internacional y veremos que coincide exactamente con la visión comunista de América latina. Apoyo a Venezuela, alineamiento con Bolivia y Ecuador y un combate encarnizado con las democracias liberales de América (Chile, Colombia, Peru, Paraguay y el Brasil post Dilma).

Yo los invito a escuchar a los periodistas “kirchneristas” que aún quedan en Radio Nacional (Mario Weinfeld, Aliberti, Anguita, Mona Moncalvillo) y verán como todos siguen repitiendo los argumentos que les bajan desde Cuba. Por ejemplo ahora tratar de defender la indefendible posición de Maduro y los militares de Venezuela.

En este momento CFK con la fundación de su “unión ciudadana” terminó de confirmar su ruptura con el peronismo, solo falta que se saque la careta y se pase a llamar de una vez por todas “comunista”.

Para los que piensen que esto no puede ser así porque la equina está podrida en la guita que se afanó no se olviden que esta manera de actuar es la base de la “estrategia revolucionaria” de todo líder comunista, usar al pueblo para encaramarse en el poder, procurar nunca tener que dejarlo, enriquecerse robando, llevar sus dirigentes una vida de privilegios (Stalin, Castro, Mao, Maduro) porque ellos son los elegidos. Mientras su pueblo queda sumido en la miseria más abyecta por culpa del “imperialismo capitalista extranjero que les impide desarrollarse”.

Si esta equina corrupta regresa al poder esta vez no lo va a soltar más y la Argentina, será como Cuba o Venezuela.

Basta que observemos como la juventud venezolana huye de su país para tener una visión del futuro de nuestros hijos y nietos si esto llega a suceder.

A nosotros los ciudadanos de bien de impedirlo.

 

 

                                                                Jorge Melchor Greco

                                                                  El Foyel, 05.08.17

 

 

lunes, 22 de agosto de 2022

Un país de pelotudos. (Este artículo lo escribí en 2017, pero dada la proximidad del mundial tiene plena vigencia).

 

No sé si saben pero los términos « pelotudo » y « boludo » ambos son argentinos y no se usan en ningún otro país de habla hispana.

Según la historia parece que estos calificativos nacieron durante la guerra de la independencia cuando las tropas patriotas usaban armamento muy sofisticado como siempre en Argentina (lanzas de caña tacuara, cuchillos hechos como se podía y sables que provenían de algún enemigo), las armas de fuego eran casi inexistentes y como tirar flechas quedaba feo parece que las únicas armas con las que contaban para tirar a distancia eran las “bolas” es decir las boleadoras de origen indígena que podían ser de dos elementos o de tres.

Cuando esta arma tan sofisticada tenía una sola bola ésta era más grande y se la llamaba “pelota” tal vez porque su tamaño era similar al que se usaba en el juego de pelota que también era de origen indígena (azteca para ser preciso).

Ahora bien en el ejercito patriota parece que las primeras líneas que tenían que oponerse al ataque del enemigo (que si tenía armas de fuego) estaba formada por los “boludos” y los “pelotudos”, que tenían como misión lanzar sus “bolas” y “pelotas”  y tratar de pararlos antes que llegaran al cuerpo a cuerpo.

Obviamente estas tropas tenían gran número de bajas, como todas las primeras líneas en las guerras de la historia, y cuando los oficiales trataban de conseguir voluntarios para ellas no conseguían mucha adhesión. Por eso iban generalmente los castigados o los incautos, de allí el nacimiento de los términos “boludo” y “pelotudo” para estos individuos.

Esto es histórico, si no me creen búsquenlo en Internet.

En el siglo 21 los argentinos no usamos boleadoras ni pelotas para pelear pero si contamos con un pueblo que mantiene una relación “pasional” con la pelota, los fanáticos del futbol, los pelotudos de la actualidad.

Durante el periodo KK se inventó el “futbol para todos” versión del tercer milenio del “pan y circo” de Nerón, que permitía a la vez poder afanar tanto por parte del gobierno como de los dirigentes de la AFA y de los clubes. Mientras los pelotudos disfrutaban de su pasión (¿gratis?).

Considerando el amor argentino por la pelota también usaban los partidos de futbol para tapar los programas de Lanata metiéndolos a las diez de la noche, eso funcionaba porque muchos que no compartían la doctrina K preferían mirar el programa en diferido para no perderse el “fulbo”.

Ahora con el compañero Mauri estamos también en la misma, los que no queríamos otra “década ganada” no tuvimos más remedio que votarlo para evitar que ganara el compañero “mano dura” cuyo único mérito fue convencer al padre de que le comprara una lancha.

Nuestro presidente actual también proviene del “fulbo” cuando se alejó de Sevel (una de las empresas de su padre) se propuso como candidato a presidente de Boca y ganó.

Es muy edificante escuchar sus discursos comparando a la Argentina con un club de futbol y defender sus medidas haciendo un paralelo con su gestión como presidente de Boca, en su último viaje a Asia para buscar inversiones, en cada discurso hizo una mención al deporte de la pelota, en Kuwait, China e incluso en Japón.

 Si prendemos la televisión en todos los noticieros hay un capítulo para el “fulbo” del que morfan un montón de periodistas, que siempre tienen algún tema para discutir, algún jugador que defender o atacar o algún técnico para lo mismo.

Ojo yo no tengo nada contra los que le gusta jugar al futbol, es un deporte como cualquier otro y por lo tanto es sano y gratificante. Yo denomino pelotudo al personaje que con el argumento de que “a mí me gusta mucho el deporte” se la pasa sentado en el sillón del living morfando papas fritas y tomando cerveza, mientras mira en ESPN los partidos de la liga birmana.

El caso de las “barras bravas” merece un párrafo aparte, verdaderos empresarios de la extorsión se dan el lujo de apretar dirigentes, jugadores y alquilan su fuerza de choque a los políticos de turno.

Viajan al exterior como verdaderos embajadores, arman quilombo, los meten en cana y eso da tela para varias horas de comentarios en los medios. Estos delincuentes existen con la complicidad de los dirigentes, periodistas, jugadores y pelotudos.

En él mientras tanto la inflación no para, el gabinete es una bolsa de gatos, parece que se viene otro aumento de las naftas (será porque el ministro fue CEO de una petrolera) mientras se sigue diciendo que los precios pararan su escalada.

Esta todo bien, la selección tiene un nuevo técnico que trajimos de Europa, no se sabe bien a que costo, y en una de esas todavía nos podemos clasificar para el mundial de Rusia (si no si que sería una catástrofe nacional).

Realmente somos un país de pelotudos.

 

El Foyel, Patagonia 20 de mayo del 2017.

sábado, 6 de agosto de 2022

En Argentina la democracia fracasó.

 

Cuando en 1983 Alfonsín asumió el gobierno, luego de siete años de dictadura militar, dio un emocionante discurso.

“Con la democracia se come, se cura y se educa”, gritaba con su verborragia de político ante una multitud esperanzada que lo había votado.

El pueblo venía de soportar una autocracia que pensaba quedarse durante décadas, pero el fracaso de una guerra la obligó a irse con la cola entre las patas.

Pasaron 39 años y podemos hacer un balance de esa afirmación.

Con la democracia se come:  en 1983 había menos de un 10 % de pobres, indigentes menos del 2%, hoy la pobreza supera el 60%, los indigentes el 20% y asistimos al descorazonador espectáculo ve ver adultos y niños revolviendo la basura para buscar algo de comer.

Con la democracia se cura:  demos una recorrida por los hospitales públicos y comprobemos esta afirmación, también podemos preguntarles a los jubilados cuanto tarda en darle el PAMI un turno, aunque tengan una enfermedad oncológica. Veamos el auge de las empresas de medicinas prepagas, llamativamente la mayoría ligadas a entidades financieras, único refugio de los que pueden pagarlas para aspirar a una atención medica razonable.

Con la democracia se educa: en 1983 Argentina figuraba entre los primeros países por la calidad de su sistema educativo, los profesionales que se recibían en las universidades estatales eran buscados en todo el mundo (lo digo por experiencia propia). En la actualidad cada 100 alumnos que ingresan al nivel secundario se reciben menos de la mitad, y de esos menos del 20 % pueden comprender un texto y son incapaces de razonamientos matemáticos básicos, como la regla de tres simple. Yo recuerdo que cuando terminé la secundaria en una escuela estatal manejaba derivadas e integrales.

Si dejamos de lado la afirmación de nuestro estadista chascomuseño, padre del embajador plenipotenciario en España, y abordamos otros temas que hacen a la fortaleza y prestigio de un país, nos encontramos con las situaciones siguientes:

Defensa: En 1983 salíamos de una guerra contra la OTAN, a pesar de la pésima conducción de las máximas autoridades de ese momento, no podemos negar que el desempeño de nuestras FFAA fue remarcable. La fuerza aérea dio sobradas pruebas de profesionalismo y valentía, lo mismo que nuestras fuerzas terrestres. Argentina era respetada militarmente por sus países vecinos y muchos de nuestros oficiales daban cursos de entrenamiento en los mismos.

Hoy somos el país más indefenso de América Latina y cualquiera nos toca el culo, el incidente de los cinco aviones chilenos es una prueba más.

Seguridad y narcotráfico: Los que vivieron durante el gobierno militar recuerdan con nostalgia que nadie iba armado por la calle, salvo las fuerzas de seguridad. No faltará quien diga que eso era por causa de la represión antiterrorista y tienen razón, si te encontraban con un “fierro” ibas a parar al Rio de la Plata o a una fosa común, pero la realidad es que se podía andar a cualquier hora y no te mataban para robarte la billetera (en esa época no había celulares). Para tener en cuenta por quienes afirman que no hay relación entre cantidad de delitos y nivel de represión.

El narcotráfico prácticamente no existía, éste cobró volumen con el advenimiento de la democracia. cuando los políticos comenzaron a aceptar “aportes para campaña” de parte de estas mafias, poco a poco se fueron infiltrando como un cáncer en nuestra sociedad. así llegamos a la situación actual con muertos todos los días y nuestros jóvenes drogados y tirados en las calles de nuestra Patria. El narcotráfico no se puede afianzar en un país sin complicidad de la política y la justicia.

Corrupción gubernamental: Es verdad que durante el gobierno anterior a 1983 hubo casos de corrupción, por ejemplo, el del “edificio Partagás” construido por algunos líderes de la dictadura militar, para de esa forma quedarse con un departamento en el coqueto barrio de Palermo. Ahora bien, comparemos estos hechos con los casos de corrupción ocurridos en democracia, como con Ménem y nuestros gobernantes “nac & pop” del kirchnerismo.

Cultura del trabajo: Simple, antes de nuestra democracia no había planeros.

Patriotismo y soberanía: Los invito a asistir a cualquier acto patrio en una escuela pública y comprobaran que los alumnos (y en muchos casos los maestros) no cantan el Himno Nacional, entre otras causas porque no saben la letra. Permitimos que terroristas con la excusa de que son “originarios” tomen tierras, en muchos casos quemen nuestra bandera y enarbolen un trapo multicolor en su lugar y declamen que ese “territorio recuperado” no es más Argentina. pregúntenle a nuestros “hermanos chilenos” a quienes respetaban más si al gobierno militar o al democrático.

Valores en general: lo mas grave y triste de todo lo expuesto es que luego de 39 años de democracia se perdieron valores como la palabra, el honor, el mérito, el patriotismo, la superación mediante el esfuerzo, el trabajo, la familia. Esta degradación moral hace que todo valga con tal de “salvarse”, nuestra juventud ve que los políticos se enriquecen con la corrupción y optan o por corromperse ellos o irse del país.

¿De verdad piensan que esto se arregla votando?


                                                                                    El Foyel, 06.08.22